La gama de formulaciones enzimáticas de Custom Enzymes Labs ha sido especialmente diseñada para satisfacer las demandas de los cultivadores de cannabis desde la erradicación de plagas y enfermedades, la creación de suelos y raíces saludables y la conversión de desechos verdes en valiosos azúcares y fertilizantes orgánicos.  

Las enzimas son activadores vitales en el suelo y se sabe que juegan un papel importante en el mantenimiento de la salud del suelo y su entorno. Un equilibrio único de componentes químicos, físicos y biológicos (incluidas las actividades enzimáticas especialmente microbianas) contribuye a mantener la salud del suelo. Los suelos saludables son esenciales para que la integridad de los ecosistemas terrestres permanezca intacta o se recupere de las perturbaciones, como la sequía, el cambio climático, la infestación de plagas, la contaminación y la explotación humana.  

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Las plagas y enfermedades transfronterizas de las plantas afectan a los cultivos, causando pérdidas significativas a los agricultores y amenazando la producción. La propagación de plagas y enfermedades transfronterizas de plantas ha aumentado dramáticamente en los últimos años. La globalización, el comercio y el cambio climático, así como la reducción de la resiliencia en los sistemas de producción debido a décadas de intensificación agrícola, han influido.

Las plagas y enfermedades transfronterizas de las plantas pueden propagarse fácilmente a varios países y alcanzar proporciones epidémicas. Los aumentos repentinos pueden causar enormes pérdidas en cultivos y pastos, amenazando los medios de vida de los agricultores vulnerables y la seguridad alimentaria y nutricional de millones de personas a la vez.

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Los patógenos pueden existir en el suelo durante largos períodos sin causar un brote de enfermedad en las plantas. Los brotes de enfermedades son causados por un aumento en la población del patógeno o por un aumento en la susceptibilidad de la planta. La población del patógeno depende de si las condiciones del suelo son favorables para su crecimiento y supervivencia. Una de las principales razones por las que los productores enfrentan enfermedades de las raíces y problemas de salud del suelo es que la cantidad de materia orgánica en su suelo ha disminuido a niveles inaceptables.  

La planta de cannabis contiene niveles más bajos de lignina en comparación con otros materiales, lo que permite que las enzimas descompongan la celulosa y, a su vez, extraigan azúcares valiosos que, de lo contrario, quedarían en los tallos. Otras opciones incluyen convertir los desechos sobrantes en fertilizante orgánico que se puede utilizar nuevamente en el pasto o vender para obtener ganancias.